Métodos y ámbitos de adoctrinamiento
El asalto de los niños empieza en casa donde los padres creyéndose dueños de los niños, imponen a estos sus creencias, sin saber tal vez que están vulnerando los derechos de sus hijos, la iglesia católica por su parte ha usado colegios y escuelas, muchas veces pagadas por el estado, para inculcar sus doctrinas en los niños, defendiendo la materia de religión en las escuelas y últimamente que se aprueben leyes en favor de que los niños aprendan la religión de los padres, todo esto protegido por la ley tal es su actual planteamiento, quedando los niños sometidos a un bombardeo de dogmas sobre cielo, infierno, y sometiéndolos a amenazas de castigos terribles por faltar a los preceptos de una determinada iglesia y condenándolos a una vida llena de culpas que en muchos casos llevan a trastornos graves, durante etapas posteriores, todo esto a sabiendas de la influencia que van a tener sobre el niño y sobre toda su vida futura y aun asi haciéndolo con total afán, con el objetivo de mantener control político y económico sobre la sociedad, anhelando volver a sus sitios privilegiados de poder desde donde cometieron innumerables atrocidades.
Siendo que un niño adoctrinado en cualquier religión u otro tipo de ideología como tristes casos de los niños islámicos, en cuya doctrina enseñan a los niños a odiar a los judíos, cristianos, ateos u otras formas de pensar, y a las niñas a casarse incluso desde los 6 años, le será muy difícil sino imposible cambiar además de requerir ayuda profesional y una gran cantidad de recursos, y la voluntad que generalmente ha sido arrebatada por el adoctrinamiento de tipo religioso (que puede ser también político incluso sexual), se considera que su libertad ideológica, religiosa y personal ha sido grandemente – sino completamente- arrebatada por este adoctrinamiento infantil, inculcando en el niño odio y actitudes discriminadoras, incluso de odio visceral hacia otros, siendo estadísticamente bajo el porcentaje de gente que recibe ayuda y que logra salir de estas tendencias.
Conclusión
Se plantea aquí la criminalización del adoctrinamiento de niños, considerando el daño en los niños adoctrinados, yendo en contra de una visión científica o positivista de la realidad, de los ideales de la carta de los derechos humanos, de la libertad (propugnada por el iluminismo), promoviendo en muchos casos como lo ha hecho siempre la religión el mantenimiento de la pobreza como en otros tiempos medievales lo hacia la iglesia en los tiempos modernos a favor de países y de empresas que solo ven el lado del lucro, sin importarles los derechos de nadie, menos de los niños, atentando contra los pilares mismo de la sociedad en varios niveles, individual, social, político y económico, puesto que la influencia de la religión no para ahí, se considera entonces imperativo detener el adoctrinamiento de los niños venga de donde venga para respetar los derechos humanos fundamentales, y la constitución política del estado boliviana, nos encontramos pues aquí frente a un reto y a una nueva frontera de los derechos civiles.
STEVE CONDE
Siendo que un niño adoctrinado en cualquier religión u otro tipo de ideología como tristes casos de los niños islámicos, en cuya doctrina enseñan a los niños a odiar a los judíos, cristianos, ateos u otras formas de pensar, y a las niñas a casarse incluso desde los 6 años, le será muy difícil sino imposible cambiar además de requerir ayuda profesional y una gran cantidad de recursos, y la voluntad que generalmente ha sido arrebatada por el adoctrinamiento de tipo religioso (que puede ser también político incluso sexual), se considera que su libertad ideológica, religiosa y personal ha sido grandemente – sino completamente- arrebatada por este adoctrinamiento infantil, inculcando en el niño odio y actitudes discriminadoras, incluso de odio visceral hacia otros, siendo estadísticamente bajo el porcentaje de gente que recibe ayuda y que logra salir de estas tendencias.
Conclusión
Se plantea aquí la criminalización del adoctrinamiento de niños, considerando el daño en los niños adoctrinados, yendo en contra de una visión científica o positivista de la realidad, de los ideales de la carta de los derechos humanos, de la libertad (propugnada por el iluminismo), promoviendo en muchos casos como lo ha hecho siempre la religión el mantenimiento de la pobreza como en otros tiempos medievales lo hacia la iglesia en los tiempos modernos a favor de países y de empresas que solo ven el lado del lucro, sin importarles los derechos de nadie, menos de los niños, atentando contra los pilares mismo de la sociedad en varios niveles, individual, social, político y económico, puesto que la influencia de la religión no para ahí, se considera entonces imperativo detener el adoctrinamiento de los niños venga de donde venga para respetar los derechos humanos fundamentales, y la constitución política del estado boliviana, nos encontramos pues aquí frente a un reto y a una nueva frontera de los derechos civiles.
STEVE CONDE
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