jueves, 9 de octubre de 2008

SIGUEN DENUNCIANDO


09/10/2008

El Plural / Macro/Vida

MACRO/VIDA

Desvelar secretos que vulneran la intimidad está penado con 4 años de prisión

Un cura podría ir a la cárcel por airear en misa los nombres de dos apóstatas

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Antonio M.R, sacerdote de Coya (Asturias), podría ir a prisión después de haber mencionado en una homilía los nombres y apellidos de dos señoras que previamente habían presentado en su parroquia una solicitud de apostasía.

Según informa La Voz de Asturias, las dos demandantes son hermanas y se enteraron por su madre de que el párroco de este pequeño pueblo asturiano, de apenas 100 habitantes, había citado sus nombres durante el sermón.

Datos privados
La denuncia se presentó en el juzgado de Instrucción de Piloña el pasado 29 de septiembre. El abogado de las dos apóstatas, José Baquer, señala que el sacerdote habría delinquido al difundir datos correspondientes a un fichero privado, hecho penado con hasta tres años de prisión.

4 años de prisión
También cabe la posibilidad de que el juez que instruya el caso entienda que se trata de un profesional que, "con incumplimiento de su obligación de sigilo o reserva, divulga los secretos de otra persona". En este supuesto, Antonio M.R. podría ir a prisión entre uno y cuatro años.

Órdenes del Arzobispado
Antes de interponer la denuncia, las denunciantes mantuvieron una conversación telefónica con el párroco en la que les aclaró que tenía libertad "para hablar de quien quisiera", y aseguró que dio sus nombres y apellidos "siguiendo órdenes del Arzobispado de Oviedo".

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